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El lado B del fútbol

El fútbol femenino en Argentina ha estado invisibilizado durante una gran parte de su historia, existe pocos registros de los comienzos en nuestro país y siempre fue sosegado por los medios masivos de comunicación.

El primer partido del que existe registro en Argentina se disputó en 1923, en la cancha de Boca. Ahí se enfrentaron los equipos llamados “Argentinas” vs “Cosmopolitas” donde unas seis mil personas fueron al encuentro. Así, transcurrió el tiempo hasta que en el año 1971, la selección argentina por primera vez puedo estar presente en un mundial de futbol. Si bien viajaron a México unas 17 argentinas logrando un triunfo sobre Inglaterra de 4 goles contra 1, ese viaje fue muy particular y significativo para el deporte femenino ya que fueron sin contar con apoyo oficial o sponsors que las acompañen. El equipo argentino arribó a México sin botines, sin médicos y sin entrenador entre otras cosas, marcando la tajante desigualdad que existía en el fútbol.

El triunfo de las argentinas sobre Inglaterra fue demoledor ante un estadio repleto de aficionados. Elba Selva la protagonista de los 4 goles, por muchos años no se animó a contar su historia, ya que al regresar a Argentina no pudo ser escuchada porque nadie la contacto para darle la bienvenida, ni realizarles notas desde los medios de comunicación.

Elba Selva
Elba Selva

Años más tarde, el fútbol femenino comenzó a adquirir relevancia cuando Argentina participó en el Campeonato Sudamericano Femenino 2003, donde obtuvo el segundo lugar y la clasificación por primera vez en la historia a la Copa Mundial Femenina de Fútbol de FIFA 2003. En el Campeonato Sudamericano Femenino de 2006, la selección conquistó el primer lugar. Con ese resultado Argentina logró un triunfo histórico, obtuvo la clasificación directa a la Copa Mundial Femenina de Fútbol de 2007 y la clasificación -por primera vez- a los Juegos Olímpico de Pekín 2008. Tuvieron que pasar 12 años, para que Argentina volviera a clasificar a un mundial. En 2018, con la mendocina Estefanía Banini como capitana y figura, la selección dijo presente en el Mundial de Francia.

Hablando de la actualidad, el 17 de marzo del 2019 la AFA y Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA) firmaron un acuerdo marco para incorporar al torneo de Primera División femenino como categoría profesional. Con esto, los clubes que participan en el torneo estuvieron obligados a firmar un mínimo de ocho contratos profesionales con un sueldo básico equivalente al que tienen los futbolistas de la Primera C. La AFA, por su parte, destino una ayuda económica a cada club de Primera División durante el primer año para que puedan cumplir con el pago de los salarios de las jugadoras profesionalizadas.

El primer partido del que existe registro en Argentina se disputó en 1923, en la cancha de Boca. Ahí se enfrentaron los equipos llamados “Argentinas” vs “Cosmopolitas” donde unas seis mil personas fueron al encuentro.

Según el convenio de trabajo, el club estaba obligado a pagar lo establecido en el contrato, a dar un día de descanso laboral por semana, a prestar asistencia médica por lesión y a pagar gastos de transporte en caso de viaje. También, según el reglamento del certamen, todos los clubes deben contar con una ambulancia y un médico matriculado a la hora de disputar un partido como local, de lo contrario el mismo no se puede iniciar. Estas medidas se dieron en el marco de un movimiento feminista que ha crecido mucho desde el 2015 hasta acá y que ha adoptado al deporte como uno de los tantos espacios de lucha.

Macarena Sánchez, ex futbolista de la UAI y actual jugadora de San Lorenzo, inició una denuncia a su club demandando ser tratada como profesional. Meses más tarde fue la primera futbolista argentina en firmar contrato profesional junto a otras compañeras del club.

Por último, pero no menos importante, no hay que olvidar las denuncias que han realizado las jugadoras de abuso, acoso, maltrato y demás, también visibilizar la lucha de las jugadoras y periodistas para que las dejen disputar todos los partidos en los estadios principales, que todos los partidos puedan ser televisados con las herramientas necesarias, que todas las jugadoras tengan contratos profesionales, también lograron que todas las futbolistas tengan sus apellidos en las camisetas y que incluyan a mujeres trans en los equipos garantizándoles un contrato.

Por Belén Benvenuto

6to. D Comunicación

Materia: Taller de Producción del Lenguaje

Prof. Marisa Bin

 

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